Acuerdo pesquero feroés-ruso en la balanza
El futuro del acuerdo de larga data entre las Islas Feroe y Rusia, que en circunstancias normales debería renovarse a finales de este año, parece estar en juego, y la incertidumbre se ha visto agravada por la decisión del primer ministro de las Islas Feroe. Bárður á Steig Nielsen convocará elecciones generales para el 8 de diciembre.
Dado que los productos alimenticios están exentos de las sanciones contra Rusia, las Islas Feroe no tienen la obligación de poner fin al acuerdo, en virtud del cual Rusia obtiene acceso a la bacaladilla en las aguas de las Islas Feroe y la flota de las Islas Feroe obtiene cuotas de pescado de fondo en el mar de Barents.
De todos modos, las islas están bajo presión de Dinamarca y de otras direcciones para que no renueven el acuerdo, que ha estado vigente desde la década de 1970.
Los partidos dentro del Parlamento de las Islas Feroe también se han dividido profundamente sobre el tema, con los partidos de la oposición a favor de poner fin al acuerdo, mientras que la coalición en el poder se ha mostrado reacia a dar ese paso, ya que esto sin duda perjudicaría económicamente a las Islas Feroe.
La falta de renovación del acuerdo afectaría duramente a los operadores de arrastreros de las Islas Feroe, sobre todo porque varios operadores de arrastreros de las Islas Feroe han realizado inversiones sustanciales en nueva capacidad pesquera, y perder el acceso a la zona rusa del Mar de Barents sería un duro golpe.
El acuerdo entre las Islas Feroe y Rusia ha estado vigente desde 1977 y se ha renegociado rutinariamente al final de cada año. Terminará automáticamente si no se renueva. Pero cómo se desarrollará esto seguirá sin estar claro hasta después de las elecciones del próximo mes.
Fuente: Sea Food Media/Fis